jueves, 22 de septiembre de 2022

ADEGA OS CIPRESES

 

Los Cipreses

De bien sabido es mi pasión desmedida por la Ribeira Sacra, como cada verano mis vacaciones allí me llevan, estás me sirven para conectar con la naturaleza, me sirven para purificar cuerpo y alma, pero de bien sabido,  que la cabra tira al monte, y yo tiro de mi pasión los vinos, las vacaciones en Ribeira sacra, también  me sirven, para satisfacer mi necesidad de descubrir y conocer nuevos proyectos enológicos, de encontrar esas  bodegas singulares y únicas que marquen la diferencia.

Lo cierto es que la d.o. Ribeira Sacra se presta muy bien para los apasionados como yo del vino, se presta para conocer gentes maravillosas, bodegas y vinos. Este ha sido el caso de visitar a Cris, propietaria de un magnifico proyecto, con grandes vinos, vinos con mucha, pero mucha personalidad. Los vinos de la bodega LOS CIPRESES.



Los Cipreses, es una preciosa bodega y viñedo ubicados,  en una de las mejores zonas vitícolas de esta denominación de origen, Chantada, paraje rodeado de preciosas viñas bañadas por el rio Miño enclavada en profundos  cañones. Bodega con mucha historia, un lugar enclavado, donde hace 300 años, existía ya una posada, que ofrecía  a los caminantes un vaso de vino, en la entrada dos cipreses anunciaban su presencia, y  de ahí su bello nombre.

Todo su viñedo es propio, y se encuentra plantado en los alrededores de la bodega, todos ellos cerca de su lugar de elaboración, viñedos con la particularidad de que están divididos en varias parcelas: A Granxa; Roimil; Tarreo da Calexa y la Viña do Inferno. Este último un  viñedo muy viejo, localizado al fondo del cañón que con solo mirarlo te enamora, te cautiva, seduciéndote, las variedades cultivadas en estas parcelas son las  típicas de la zona, Godello y Mencía, pero también variedades que hacen único y diferentes sus vinos; Treixadura, Alvariño, Garnacha tintorera y Araúxa (tempranillo adaptado a la zona).



La elaboración de esta bodega es extremadamente artesanal y manual, una producción  mínima, de tan solo 3000 botellas aproximadamente en total,  de  la que algunos de sus vinos singulares no llega a 500 botella, un lujazo, para los sentidos fue  el poder probarlos. Vino con expresión con “Soul”,  eléctricos, minerales pero sobre todo muy elegantes. Que  plasman en ellos el paisaje, el entorno de la bodega, pero además llevan en su adn, el sentimiento y pasión que Cris infunde en ellos.



Un Mencía joven, un blanco de Treixadura, Godello y Alvariño, pero también un tinto elaborado con 65 % Mencía, 25 % garnacha tintorera, godello, treixadura y jerez. Y criado en ánfora de barro,  que se elaboran tan solo 1000 botellas y del cual solo puedo decir MARAVILLOSO; en mayúsculas, y sigue la lista de joyitas de Los Cipreses su Cypressus vino magníficamente ensamblado del copage de Mencía y Araúxa parte de estas uvas procedentes de la viña do inferno, con una crianza corta de 6 meses en barrica de roble francés.



Cris inquieta e innovadora, es capaz de hacer de una desgracia un triunfo, hacer del desastre una joya de vino. 2021 año “horribilis” para la bodega a muy poquitos días de la vendimia una granizada, esta destrozo el trabajo de todo un año perdiendo así la totalidad de la uva blanca para la elaboración de su grandioso Cipreses blanco, Cris atrevida  y con mano firme, no acepto el no poder ofrecer un blanco, y de forma creativa, y para mi genial, elaboro un blanc de noir, a partir de uva Mencía, yo creo el único blanc de noir de Mencía, un vino distinto, que para los atrevidos le apasionará, tan sólo 500 botellas de Saraiba nombre que en gallego significa granizada, y el cual espero siga elaborando que siga ofreciendo es vino tan excepcional y diferente. Que engrandece la tradición vitivinícola de la zona.



No lo dudéis y si visitáis la Ribeira Sacra y os acercáis a Chanada sin duda hay que conocer adega os Cipreses.

Salut i vi.

martes, 12 de abril de 2022

Legítim de Papers de vi

Legítim de Papers de vi






El mundo mágico del vino, estos últimos tiempos está atrapado por la globalización,  las modas y las tendencias del mercado.  Por supuesto que está bien, el negocio es el negocio, y aunque sea pasión lo que muchos sentimos por el vino, hay que entender que para que esto sea así a de funcionar bien económicamente, pero lo cierto, es que esta vorágine ha provocado el abandonado en gran medida de  la autenticidad y originalidad de muchos vinos, perdido a veces también, el origen y la tradición de estos, llevándonos a probar, buenos vinos, pero posiblemente sin alma, y sin personalidad.

De vez en cuando un grupo de amigos, personas locas por el vino, personas locas por su territorio, por sus tradiciones y su entorno, y por qué no, locas porque sí, porque aman el vino y lo que ello conlleva, sin más tabúes que el de hacer un vino rico, sincero irrepetible y con personalidad propia. Cuando esta alineación de los astros se realiza, se conjuga un vino único que te eleva a otra dimensión, vino singular  y entrañable, con personalidad propia, y que además refleja la tradición de la tierra, el buen hacer tradicional de la zona, y nos reencuentra con el pasado vitícola de esta maravillosa tierra.




Pues eso es lo que ha pasado con los amigos de Papers de vi, y los amigos de Alella vinícola, Oscar, Ramón y Xavi García el enólogo de Alella vinícola, han creado un vino que nos atrapa en el pasado de los vinos de Alella, pero con el sentimiento y la razón de los vinos actuales, conjugando así un mundo de sensaciones placenteras, increíbles.





Legitim de Papers de vi, es un vino de edición limitada, eléctrico, cautivador, elaborado con un 70% de pansa blanca y un 30% de garnacha blanca, criado en una gran bota de vino generoso seco, en crianza oxidativa, pero a la cual le apareció velo flor, realizando también una crianza biológica, a todo esto, por si fuera poco, en un momento estratégico de la crianza se le incorporo un cantidad abundante, de un vino generoso seco de 1976, una comida de coco impresionante  que le ha aportado a este vino personalidad, y carisma singular y único.


De precioso color anaranjado, ligeramente opaco con un brillo magnifico, elegante a la vista, de nariz muy compleja y sumamente intensa, levaduras, bollería, manzanilla en flor, especias, cítricos, mieles, podías estar perfectamente con la nariz en la copa durante horas deleitándote de su impresionante e embriagadora aroma, pero la boca no se queda corta ni mucho menos desde el primer sorbo, desde su entrada en boca, no para de ofrecer posibilidades, de ofrecer matices de sabor, inquieto de principio a fin, con muy buena estructura, fresco muy complejo.

Sin duda alguna un guiño al pasado para en el presente llenar nuestra mesa de múltiples y maravillosa alianzas gastronómicas, suerte poder de vez en cuando probar vinos así.


SALUT I VI.