miércoles, 13 de octubre de 2021

ADEGAS ALGEIRA

 

Adegas Algeira




Siempre me he reconocido públicamente enamorado de la Ribeira Sacra, del entorno natural y del conjunto románico, más bonito del mundo, del paraíso terrenal donde cuerpo y alma se unen en un solo ser. Y hoy os quiero acercar con esta entrada en mi blogg, esa esencia de la mística y mágica Ribeira Sacra, acercarnos corazón a ella y a saborear sus paisajes, a oler e interpretar sus sentidos más profundos, y creo que no hay mejor manera para ello que adentrándonos en uno de sus referentes enológicos, que han sabido conjugar en una botella esa esencia. Dejarme que os guie en estas cuatro letras, por el sentimiento y pasión de adega Algeira, hacia ese entorno.


 Fernando Gonzalez de Adegas Algeira es uno de los pioneros de la zona, se podía decir que uno de los padres, de la viticultura de calidad de esta emblemática y preciosa comarca vitivinícola.

Aunque, realmente, y en valor de la verdad, me va a ser muy difícil hablaos de esta bodega. Siempre que escribo algo en mi blogg, suele ser sobre un vino determinado, o también sobre una bodega singular o diferente.



Pero hablar sobre Adega Algeira, se debería de extender, mucho, pero mucho más allá de lo que habitualmente hablo, hoy debería explicar sus afamados y exquisitos vinos elaborados con uva Mencía, pero tambien con variedades locales como la Caíño, Sousón, Brancellao y Merenzao. la genialidad de su Godello, la sutileza de estos blancos grandiosos, del cual destaco el Godello barrica Cortezada que posiblemente y a mi criterio es el más significativo de la Ribeira, pero tendría de seguir hablando de su gran proyecto dinamizador de la zona, de la recuperación de viñas, parajes y lugares emblemáticos y maravillosos, que crean la silueta del entorno, como no, de su oferta en gastronómica, con ese restaurante que dispone en la propiedad, donde comer es como  comulgar con el mismísimo “altísimo”, un restaurante precioso rodeado de naturaleza, donde han respetado la fisonomía tradicional de la casa actualizándola con  mimo, cariño  y mucho gusto, donde la Unesco, ya tan solo por esa experiencia incorpórea, debían tan solo por ella declarar a la Ribeira Sacra patrimonio de la humanidad. Tendría de hablar también, de un secreto  que guardan dentro de la propiedad, y es un aceite de olivos  de sus fincas, un aceite con el encanto de la Ribeira Sacra único, aromático, sabrosísimo, procedente de aceitunas de las variedades locales: la Brava y la Mansa. Pero posiblemente lo que hoy destaco en esta entrada, es de la persona, de la pasión, a veces extrema, de Fernando, alma mate junto a su mujer Ana de todo este proyecto maravilloso, que aúna gastronomía, enología y turismo. Sin duda su pasión contagia. Contagia amor por el territorio por  tradición, que él sabe  plasmar como si en una obra de arte se tratara en la  excelencia de todo aquello que toca, trasmitiéndosela a todo y todos los que les rodean, haciéndosela que sea suya propia. Es el  sueño hecho realidad de un visionario que ama su tierra y es embajador de ella, exportándola de la mejor manera, en forma de vino.





Sabéis también que una de mis citas favoritas, es decir que el vino es un paisaje que está en estado líquido, que es la imagen liquida del sabor y aroma del entorno, que es el alma del lugar encerrada en él,  que también es, el sentimiento de quien lo elaboradora, de su sueño y de su tiempo. Y que si se conjuga todo esto, tenemos el vino ideal, que al margen después de los gustos personales nos pueda gustar más o menos, pero sencillamente eso es la esencia de la genialidad. Y desde luego, todo esto, se confirma cuando disfrutas de  los vinos sublimes de Adegas Algeira.




Me encantaría, que con esta entrada, yo por un momento también os haya contagiado un poquito de pasión por la Ribeira Sacra, y que os animéis a conocerla, a conocer el territorio, su naturaleza, su entorno, sus viñedos y bodegas, y lo mejor sus gentes, gentes como Fernando, que os tramitarán la emoción de tan noble tierra.


¡Salut i bon vi!

Y en recuerdo y homenaje a mi amigo Pedro Cano, ¡por ti amigo!, 

¡POR LOS PRESENTES Y LOS AUSENTES!