jueves, 13 de marzo de 2014

Roger Goulart Gran cuvee Josep Valls 2008



Roger Goulart
Gran cuvee Josep Valls
2008


Quizas decir Roger Goulart no nos suene mucho, aunque es una cava con una gran tradición y trayectoria.  La cava ubicada en Sant Esteve  de Sesrovires se tiene constancia de ella desde siglo XVIII, en documentos fechados entre 1710 y 1773 y que se conservan en el Archivo Municipal. 
La bodega catedral del cava, data de principios del siglo XIX, la construcción del señorial edificio , de claro signo modernista, fue obra del arquitecto Ignasi Mas i Morell y ejecutado por el maestro de obras Josep Bou i Estruch, que era el abuelo del mítico enólogo de Goulart, Josep Valls a quien se hace homenaje en el cava del que hoy hablo.
Como bien he dicho ya es un cava que  quizás en un principio pueda pasar desapercibido, pero os aseguro que debemos de tenerlo en cuenta, pues su calidad lo abala, Roger Goulart cuvee Josep Valls 2008, es un gran cava digno de nuestros mejores momentos.
Josep Valls 2008, nace de la mano del actual enólogo de la bodega Pedro Muñoz, que quiere expresar en el todo el potencial de la bodega, realizando un cava de larga trayectoria, de gran reserva, clásico pero muy sincero y expresivo, un gran cava con gran potencial gastronómico, que nos dará muchas satisfacciones en la mesa, acompañando un sinfín de posibles maridajes.
Josep Valls 2008, se elabora a partir de un  Xarel·lo 40%, Macabeu 25%, Parellada 25% y  Chardonnay  10%. Con una crianza con sus lías de 48 meses en la tranquilidad de la cava, el resultado un cava muy interesante muy fresco de grandes matices y gran profundidad, ideal para los momentos más solemnes del día.
De color amarillo dorado, muy limpio y brillante con buena formación de burbujitas muy finas y continuas que llegan a formar un bonito rosario, nariz muy elegante muy compleja e intensa llena de matices, de fruta muy fresca y agradables toques acompotados, recuerdos de bollería fina, que recuerda al pan recién horneado, con fina balsámico, boca fresca e interesante con matices muy frescos  y vivos con buena acidez muy equilibrada y agradable, con un final muy amplio la percepción del carbónico es sumamente agradable y sutil.
En definitiva un cava para tener siempre cerca para disfrutar de los buenos momentos de la vida.